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Construido entre 1940 y 1958 con presos republicanos. El Valle de los Caídos, Valle de Cuelgamuros desde 2022, será, ahora ya, con el acuerdo del Vaticano, un lugar de memoria democrática y reconocimiento a las víctimas. La cruz monumental de 150 metros permanecerá, los benedictinos podrán seguir en la abadía y parte de la basílica seguirá destinada al culto. Pero no habrá nunca más actos políticos ni de exaltación de la dictadura. El ministro Bolaños y el secretario de Estado del Vaticano firmaron hace un mes el acuerdo que permitió la salida del anterior prior y la llegada del nuevo responsable, comprometido con el proceso de resignificación del lugar. Será a través de un concurso internacional de ideas, con un delegado eclesiástico en el jurado. La noticia coincide con el final del contencioso que paralizaba las exhumaciones. El Tribunal Superior de Madrid ha desestimado los recursos de grupos profranquistas, y da luz verde a continuar recuperando los restos de familiares fallecidos.

-Redacción-